COPLA XXVII
MI GUARDiA PRETORIANA
Quiero que me escuches
que el inexistente tiempo
detenga el antes, el ahora
el después.
Instantes que no volverán
quizás, nunca estuvieron.
Nuncas fosilizados de ayer.
Yo tenía un curso por dar
caras nuevas, nueva gente.
Y de repente, el final.
A partir de hoy,
de ahora,
de ya.
Todo acaba.
Y no es que quiera que viajes
al pasado
no toca llorar.
Y yo quise,
yo quise a mis chicas hablando de traseros,
yo quise el humor de momentos sin gracia,
y al yo nunca entiendo nada.
Quise pelis para llorar o de miedo o Hachicko o grasientas hamburguesas que saborear.
Todos dando un paso al frente,
Appels y Androides.
Y mi guardia pretoriana.
Así sí o así no.
Retratado.
Sea blanco, sea grana
ya sea azul,
al final,
todo ha sido muy wonderful.
Al final, pero
todo efímero
y parecía no llegar,
y sin saber,
pasó.
Ya pasó.
Hasta siempre por un tiempo
que nunca existio... O quiza si.
Junio 2016